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Restar residuos, sumar salud

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Científicos de todo el mundo se reúnen en Barcelona para discutir sobre la renovación celular, proceso íntimamente ligado al envejecimiento y a enfermedades neurodegenerativas o cardiovasculares.

El Institut d’Estudis Catalans acogerá los días 21, 22 y 23 de marzo la Barcelona Biomed Conference “Autofagia Mitocondrial”;, que congregará a 150 expertos nacionales e internacionales para discutir sobre los últimos avances en el campo de la autofagia mitocondrial, que trata de la degradación y el reciclaje de componentes específicos de las células previamente dañados. La autofagia mitocondrial se ha convertido en menos de cinco años en una de las áreas de mayor interés para el estudio del envejecimiento celular y enfermedades de alto impacto en la sociedad como las enfermedades neurodegenerativas o cardiovasculares.

La Barcelona Biomed Conference ofrecerá un foro interdisciplinario donde 20 conferenciantes de talla mundial –diez norteamericanos, ocho europeos y dos japoneses - expondrán sus últimos avances en el campo. La conferencia, impulsada por el IRB Barcelona y la Fundación BBVA, está organizada por Antonio Zorzano del IRB Barcelona y Luca Scorrano de la Universidad de Génova en Suiza.

Renovarse o morir

La autofagia es el fenómeno que se encarga de descomponer el material aberrante de la célula para favorecer su destrucción o reciclaje. Este proceso de limpieza puede afectar a cualquier componente celular que haya estado dañado, como es el caso de las mitocondrias, unos orgánulos celulares muy importantes que se encargan de generar el combustible para que las células puedan funcionar. El mecanismo de autofagia específico de mitocondrias se llama autofagia mitocondrial o mitofagia.

Las alteraciones en la capacidad de “limpiar las mitocondrias aberrantes” afectan especialmente a aquellas células que persisten durante más tiempo en el organismo, como las neuronas, las células del corazón o las del músculo esquelético. “Una acumulación de mitocondrias dañadas a lo largo de los años hace que estas células vivan peor, aumentando el riesgo de padecer enfermedades neurodegenerativas como Parkinson, enfermedades cardiovasculares, algunas distrofias musculares e incluso enfermedades metabólicas como la diabetes o la obesidad”, apunta Zorzano.

A pesar de que hace más de 150 años que se sabe de la existencia de las mitocondrias, no fue hasta hace unos pocos años cuando se relacionaron estos motores celulares con los procesos de muerte celular programada o apoptosis, aquellos que regulan la vida y la muerte de las células. “Estos resultados pueden tener un impacto en cáncer”, afirma Scorrano. “Sabemos que la una disminución de la mitofagia provoca un aumento en la apoptosis, por lo que podríamos favorecer la muerte de las células cancerosas manipulando la destrucción de las mitocondrias en estas células”.

En la actualidad, el desafío es entender los mecanismos moleculares subyacentes a la mitofagia para entender mejor la base de un gran número de enfermedades y trasladar estos conocimientos a la clínica para poder combatirlas.

Entre los científicos invitados a la conferencia destacan Ana-María Cuervo, del Albert Einstein College of Medicine en Nueva York, Estados Unidos. Cuervo está considerada actualmente como una de las mayores especialistas mundiales en el campo de autofagia. Presentará sus últimos trabajos en autofagia en respuesta a estrés y su relación con el envejecimiento celular.

Thomas Langer, de la University of Cologne en Alemania. Reforzará la hipótesis según la cual existe una relación entre mitocondrias dañadas y enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson o el Alzheimer.

Orian Shirihai, de la Boston University en Estados Unidos. Shirihai fue uno de los primeros científicos que relacionaron la degradación de las mitocondrias con enfermedad. Hablará sobre los mecanismos moleculares que regulan la destrucción de las mitocondrias.

IRB Barcelona

El Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona) trabaja para conseguir una vida libre de enfermedades. Desarrolla una investigación multidisciplinar de excelencia para curar el cáncer y otras enfermedades vinculadas al envejecimiento. Establece colaboraciones con la industria farmacéutica y los principales hospitales para hacer llegar los resultados de la investigación a la sociedad, a través de la transferencia de tecnología, y realiza diferentes iniciativas de divulgación científica para mantener un diálogo abierto con la ciudadanía. El IRB Barcelona es un centro internacional que acoge alrededor de 400 científicos de más de 30 nacionalidades. Reconocido como Centro de Excelencia Severo Ochoa desde 2011, es un centro CERCA y miembro del Barcelona Institute of Science and Technology (BIST).